Poemas de amor (y de sufrimiento) que intentan ser reflejo de la vida de Dios en el interior del autor.
Uno, dos, tres, cuatro, pasos que te están buscando allí donde los dedos cuentan sin dedos milagros... Nada es imposible para el Amor, para Dios. El autor en esta obra cree sin límites que Dios se deja penetrar en todo su misterio. Se lo dice cara a cara, en primera persona, amándolo en el gozo y en el sufrimiento.