Esquiar es un deporte complejo al que se añade el riesgo inherente a cualquier actividad dinámica en la naturaleza.

Tradicionalmente se ha puesto mucho énfasis en la técnica, pensando ingenuamente que sólo con ella se pueden superar las dificultades.
Esquiar con los pies explica de manera sencilla no solamente qué hay que aprender, sino cómo es la forma más simple y efectiva de aprenderlo, y ello respetando las cualidades de cada individuo. A la vez, trata de otras cuestiones aparte de la técnica como las sensaciones con las que se obtienen buenos resultados o la manera de concentrarse adecuadamente para ejecutar los movimientos en cualquier circunstancia. Intenta aportar, de esta forma, una modesta opinión acerca de en qué consiste el aprendizaje del esquí, sin separar la técnica por un lado, la pedagogía por otro y las particularidades de cada alumno por ninguna parte, porque, ¿es que andan disociadas estas cosas en el deporte?
Esquiar con los pies es un compendio de algunos instrumentos que, gracias a las experiencias que humildemente compartí con muchos de los mejores profesores y entrenadores del mundo, he comprobado que sirven a un esquiador para progresar y para realizar, en todas las circunstancias, los movimientos que aparecen en los manuales tradicionales de técnica de esquí. Estos apuntes sólo intentan mostrar que es posible encajar las piezas del puzzle del esquí, pensando en lo que hacemos con los pies.